El blog de tessa.barlo

Toda persona que sea el responsable de llevar un restaurante sabe la importancia que tiene la carta de vinos, ésta favorecerá la opinión a favor o en contra, por los vinos que encuentre en la carta. La carta de vinos muestra el interés y predisposición del restaurante para agradar al cliente y el tiempo que dedica a este ámbito.

La carta de vinos debe estar configurada en concordancia con la comida que ofrecemos, así un restaurante de comida francesa, estará compuesta por una variedad de vinos franceses, buscando el equilibrio con la diversidad de los más tradicionales, con los exclusivos. Este método también hará que la carta sea dinámica en su variación y optima a cualquier persona para escoger un buen vino.

Cualquier restaurante deberá tener presente, su carta de comidas, para ofrecer todo tipo de vinos acorde con ella y no decepcionar al cliente más conservador o más progresista. Dante Alighieri dijo: “El vino siembra poesía en los corazones”

En primer lugar indicar que la presentación de la carta debe ser efectuada con el mismo rigor que la carta de menú, dándole seriedad a la misma. No debe tener ninguna falta de ortografía, con aspecto pulcro y fácil de leer. Al mismo tiempo, se debe evitar que se lea como una simple lista, dándole un toque armonioso y cálido. La clasificación clásica es por este orden: espumosos, blancos, tintos, dulces y generosos. Se les añade el país y sus respectivas regiones e indicar el año de la cosecha. Por último, no olvidar que debe ser una carta de vinos con precios, por lo que, lo añadiremos al final.

Existen cartas que se diseñan en función de la variedad de la uva, es más frecuente en restaurantes sibaritas.

Los precios se colocan de menor a mayor, por orden en sus diferentes variedades, se ha comprobado que esta fórmula tiene mejor atracción, en los estudios de marketing. Otro tipo de cartas las planifican por la uva, de más joven a más vieja. Existen en el mercado empresas que pueden asesorar para confeccionar la carta de vinos como “Enotecacencibel.com/servicios_a_empresas.html” donde cumplen todos los requisitos para estar bien informado.

Dice el refranero español “comer sin vino comer mezquino” Es importante tener en cuenta esta observación e incluir; Tintos o blancos con cuerpo, rosados con carácter. Sobre todo en restaurantes de todo tipo de cocina, hace que pueda satisfacer la variedad de platos escogidos y acompañan la variedad de los mismos, sin que el cliente se vea obligado sólo a consumir la botella escogida. Una carta llena de vinos excelentes pero también de vinos comparables, será de mejor agrado para todos.